Establecer mecanismos y métodos para la planeación, programación, financiamiento y operación involucrados en el Sistema Estatal del Agua, a fin de que la prestación de los servicios de agua potable, alcantarillado, saneamiento, tratamiento y disposición de aguas residuales, se ajuste a los niveles de calidad y eficiencia que fijan los parámetros internacionales.